Las visitas a la clínica veterinaria no solo se deben realizar cuando nuestros gatitos se encuentran enfermos, de hecho lo ideal es efectuar una detección temprana de ciertas patologías que se saben ocurren a cierta edad. A continuación, daremos algunas recomendaciones dependiendo de la edad o etapa de la vida en la cual se encuentre tu gato.
Cuando son gatitos, esto es hasta el año de edad: se recomienda llevarlos a la consulta médico veterinaria desde los primeros días de edad (primera semana). En esta etapa es importante que la revisión se realice en conjunto a sus hermanos y su mamá. En esta visita, lo que buscamos es asegurarnos que no se presenten malformaciones congénitas (paladar fisurado, cardiopatías, agenesias de miembros, etc.), verificar que los gatitos tengan el reflejo de succión desarrollado el cual es fundamental para que puedan alimentarse de la leche materna, que no exista infección del cordón umbilical y que podamos iniciar el registro del peso corporal. Este último, es un parámetro fundamental que nos indicará la ganancia de peso semanal y que nos orientará a saber cómo se alimenta el gatito y cual es su estado de salud general. Posteriormente, se recomienda asistir a la consulta a los 20 días de edad, para comenzar con su calendario de desparasitación y un chequeo general. A los 2 meses comenzaremos con su calendario de vacunación el cual recién se completará al año de edad. En cada consulta, le señalarán datos acerca de la alimentación, cepillados tanto de pelaje como de dientes, baños, edad de castración para hembras y machos, etc. Consulte a su médico veterinario cuáles son las vacunas indicadas para su gatito.
En la etapa de adulto joven, que va entre el primer y sexto año de edad, se recomienda realizar chequeos veterinarios cada 6 meses. En esta etapa, se hablará acerca de los manejos preventivos como vacunaciones, desparasitaciones internas y externas, cuál será su régimen alimentario y ver la necesidad o no de efectuar visitas al odontólogo. A esta edad, aún no es frecuente evidenciar enfermedades de curso crónico, pero lo recomendable es que las visitas no sólo deben hacerse cuando el gatito se encuentre enfermo.
En la etapa de la vida de adulto maduro, que va desde los 7 a 10 años de edad. Se recomiendan chequeos más frecuentes, entre 4 y 6 meses. Esto tiene por objetivo, pesquisar signos de enfermedades frecuentes que puedan aparecer en esta edad, tales como enfermedad renal crónica, hipotiroidismo, hipertensión sistémica, diabetes mellitus entre otras.
Sobre los 10 años de edad, los gatos son considerados senior. Es importante recordar que cada vez tenemos una mayor población en esta etapa y que muchos de ellos viven 20 años o más y que, por lo tanto, lo que se busca es que puedan tener una sobrevida larga con una calidad de vida buena. Además de considerar las enfermedades anteriores, a esta edad es frecuente evidenciar trastornos osteoarticulares como artrosis y cambios de conducta atribuidas a disfunción cognitiva.