Por más caricaturesco que parezca la relación entre perros y gatos, como se ha mostrado muchas veces en series animadas o videos en redes sociales, es totalmente factible que ambas especies logren una buena relación e incluso llegar a ser inseparables compañeros.
La clave para que la convivencia entre perros y gatos sea factible es una buena sociabilización a edad temprana, como por ejemplo la presentación de un cachorro a un adulto, o de un cachorro con un gatito de edades similares. Un factor importante a considerar es no normalizar las conductas de agresividad de nuestras mascotas ya que esto podría producir instintivamente ataques.
Además, depende mucho del carácter de las mascotas, existen gatos que toleran muy bien a los perros, pero otros que pueden tenerles miedo que se puede traducir en ataques.
También es relevante que la presentación que se haga de las mascotas sea la adecuada, respetando los tiempos y espacios de cada especie. Hay gatos que cuando llegan a un hogar que ya tiene un perro pueden demostrarse muy tímidos y necesitan de días para poder tranquilizarse y luego tomaran más confianza.
Asimismo, puede realizarse actividades que involucren a ambas especies, para que la interacción sea más positiva, y se asocie a un momento de diversión y comodidad. Se recomienda reforzar las acciones positivas con premios o golosinas para mascotas y también acentuar el cariño, el cual debe ser compartido entre ambas especies.
Es importante recordar que el gato es una especie territorial y delimitará su espacio, el cual deberá compartir con otra especie. En el caso del perro es una especie social y jerárquica, conductas que no son comunes entre los gatos. Por lo tanto entre ellos se establecerá una comunicación y se podrán entender a pesar que algunas veces no son “amigos”.
Sin embargo, en algunos casos es posible que nuestras intenciones de acercamiento entre nuestras mascotas sean infructuosas, siendo este el momento en el que se recomienda buscar ayuda externa como por ejemplo un etólogo especialista en comportamiento animal. Si bien, hay casos en los que no se logra que tengan una relación cercana, si se puede llegar a que convivan de forma armoniosa dentro del hogar, manteniendo el espacio de cada uno.
Por último, se puede afirmar que la relación inter especie es totalmente factible e incluso en algunos casos necesaria, sobre todo en animales que han sido maltratados o han estado mucho tiempo solos.
Siempre la recomendación es consultar a tu médico veterinario sobre cuáles son las mejores opciones antes de realizar un cambio o ingresar una nueva mascota a la familia.