Al igual que los humanos, nuestros felinos pueden sufrir enfermedades o accidentes que pueden causar la pérdida de una o más extremidades, además de la cola. Existen razas como la Bobtail y Manx en las que por mutaciones genéticas nacen sin cola o con una longitud disminuida, esto no perjudica la calidad de vida de los gatos, al igual que cuando es amputada de forma quirúrgica por un accidente. En el caso de las patas o manos, es importante destacar que las causas de amputación pueden ser variables, entre éstas se incluyen: tumores, traumas, falta de funcionalidad e incomodidad del animal por dolor crónico o un defecto de nacimiento. La decisión de amputar debe ser tomada en conjunto entre el médico veterinario y el dueño, evaluando siempre la calidad de vida que llevará el felino con menor capacidad. Hay que destacar que una amputación es una cirugía mayor, larga y con un post operatorio doloroso, por lo tanto, la comunicación entre médico veterinario y dueño es fundamental en la recuperación. Considerando lo anterior también es importante destacar que el tiempo de adaptación de una amputación de miembros anteriores es más largo que el de miembros posteriores debido a que los cuadrúpedos sostienen más peso con estos. Aun así, la mayoría de los gatos se desenvuelve bien con solo tres extremidades, ¿Cómo ayudar a tu gato? Luego de una amputación siempre es necesario un período de adaptación para que el gato aprenda a desenvolverse con una extremidad faltante, a veces incluso el veterinario puede indicar un tiempo de reposo. Sin embargo, no hay reportes de que los animales sufran de “dolor del miembro fantasma” o tengan un daño emocional por la pérdida de una extremidad por lo tanto la recuperación suele ser más rápida que en los humanos. Ahora sí, es necesario tomar precauciones al momento de llegar a la casa luego de la hospitalización y poder así preservar de la mejor manera la vida de nuestro gatito. En general se considera que a las 4 semanas post cirugía los gatos pueden hacer una vida normal, a pesar de ello el estilo de vida debe ser exclusivamente de forma indoor, esto significa que el gato no debe salir de la casa, evitando así que puede sufrir un accidente y ver afectada una de sus tres patas. Otras medidas a considerar son:
- La bandeja de arena sanitaria (baño) debe ser de baja altura o puede ser modificada para que el gato no tenga que saltar al entrar o salir.
- El peso de un animal amputado: el peso se reparte en las tres extremidades y pueden verse afectadas por mucho peso y desarrollar artritis en codos o rodillas.
- Seguridad y tranquilidad: se debe asegurar de que el gato tenga una vida tranquila y segura. Si bien se pueden mover con facilidad, saltar y correr puede que reaccionen un poco más lento a un gato con sus cuatros patas por lo que ante un ataque de un perro u otro gato puede sufrir daños.
Siguiendo estos simples consejos se puede ayudar a que un gatito amputado pueda llevar una vida totalmente normal manteniendo su esencia y podrán seguir entregando todo su amor, cariño y compañía.