El viajar con los gatos se ha vuelto una actividad cada día más frecuente, muchos propietarios lo realizan sin inconvenientes. Para ello es importante realizarlo desde que los gatitos son pequeños, idealmente desde los 2 meses de edad. Nuestra legislación establece que perros y gatos deben permanecer en sus cajas de transporte o deben ir fijos con el cinturón de seguridad por medio de un arnés especializado.
¿Por qué se habla que debe realizarse desde los 2 meses de edad?, porque es a esta edad en la cual se deben efectuar la mayor cantidad de actividades para que los gatos estén adaptados a la manipulación y no sufran estrés. El viajar puede significar un estrés importante si no hay adaptación.
En el caso de gatos que no tengan hábito de viajar se recomienda efectuar una consulta médico veterinaria para consultar acerca de la opción de utilizar algún tranquilizante. Los tranquilizantes son medicamentos que pueden tener severos efectos secundarios tales como alterar la presión sanguínea, bajar la frecuencia cardiaca y la temperatura corporal, lo anterior es dañino para un número importante de pacientes. Especial cuidado se debe tener en gatos con enfermedades crónicas como enfermedad renal o cardiopatía, o en animales seniles, en los cuales podría significar hasta la muerte de ellos.
Si, es recomendable utilizar tranquilizantes naturales como la valeriana la cual es mas segura en todo tipo de pacientes, esta se puede encontrar en diferentes presentaciones tales como collares, spot on (pipetas), toallas húmedas, en spray o en difusores. Consulte a su veterinario para su aplicación, algunos se utilizan directamente sobre los gatos, pero otros solo se aplican en el ambiente o en la caja de transporte.
Es muy reconocido la utilización de feromonas faciales sintéticas, que son las sustancias que los gatos liberan para delimitar territorios y para sociabilizar. Su utilización disminuye el estrés del viaje, también se pueden encontrar en presentaciones de spray y difusores. Es importante considerar que estas no son tranquilizantes, pero si aminoran el estrés de cualquier tipo.
En los casos que no se logre disminuir el estrés del viaje, lo mas recomendable es que los gatos se queden en su casa y mantenga la rutina de alimentación, limpieza y cariño, dejándolos a cargo de una persona amiga o de un familiar.