La odontología es un área muy importante en la veterinaria, debido a que una mala salud oral puede afectar el estilo de vida de las mascotas y generar afecciones a su organismo desde diferentes puntos de vista. La boca de los gatos es una de las partes más importante del cuerpo, es por esto que es necesaria mantenerla sana en todo momento y vida de los felinos.
Una de las patologías más encontradas en la clínica veterinaria de felinos es la gingivitis, la cual se define como la inflamación y sangrado de las encías. La gingivitis puede dividirse según su gravedad y etiología.
Según gravedad encontramos:
Leve: la más común en la clínica. Este tipo es reversible y suele aparecer por una acumulación de tátaro dental. La encía se ve inflamada y enrojecida pero no se afecta la raíz del diente.
Moderada: es habitual pero menor que la anterior. En este caso, el tártaro acumulado produce un retroceso en las encías que puede llegar a separar los dientes. En estos espacios se pueden acumular restos de alimentos o bacterias, lo cual empeora la situación.
Grave: es la más dolorosa y severa. El gato puede presentar una hipersalivación y un babeo constante, incluso dejar de comer por el dolor. La separación de las encías es habitual y suele ser más profunda que la anterior. Este tipo de gingivitis es más difícil de curar y puede ser necesario pulir y limpiar los dientes mediante un procedimiento dental, el cual requiere anestesia general.
Según sus causas:
• Calicivirus (virus)
• Retrovirus (virus)
• Linfoplasmocitaria (asociada al sistema inmune)
La principal causa de la gingivitis crónica en gatos es la existencia de otra enfermedad previa, como enfermedad renal o un retrovirus. Además, la infección en encías en gatos puede aparecer por causas:
• Higiene bucal escasa o nula.
• Problemas renales o insuficiencia.
• Enfermedades inmunológicas existentes.
• Historial de enfermedades periodontales.
• Ingesta de alimentos húmedos.
El tratamiento de la gingivitis en felinos varía según la causa que lo ha provocado. Por esto, es fundamental que acudas a un veterinario que le indique el tratamiento concreto. Aunque no existe ningún tratamiento específico, en todos los casos es indispensable mantener una buena limpieza bucal y llevar una alimentación sana.