Las vacunas son productos biológicos que contienen pequeñas partículas de agentes bacterianos o virales, los cuales son los causantes de las enfermedades que afectan a los animales. Las vacunas se utilizan para estimular al sistema inmune (sistema del organismo encargado de las defensas contra microorganismos patógenos), para tener protección en las situaciones que se vean enfrentados con los diferentes agentes que generan las enfermedades. En el caso de los gatos las primeras defensas que tienen las reciben de su madre, las cuales son entregados en la primera secreción láctea que recibe el gatito al momento de nacer. Esas defensas llamadas anticuerpos por lo general se mantienen activas y duran hasta los 2 a 3 meses edad de los gatitos, después de ese tiempo quedan desprotegidos si no reciben las vacunas apropiadas. Los gatos adultos y de avanzada edad también deben ser vacunados periódicamente debido a que en cualquier edad pueden ser atacadas con enfermedades infecciosas y en el caso de los gatos seniles presentan un sistema inmune deprimido lo que predispone a enfermar mas prontamente.
En la actualidad existen vacunas que han sido clasificadas como vacunas esenciales o vacunas core, representadas por la vacuna trilple felina (que protege contra virus herpes felino, calicivirus y virus parvovirus felino o panleucepenia) y la vacuna antirrábica que deben ser administradas a todos los gatos. El otro grupo de vacunas son las no esenciales o no core, las cuales se administran según el riesgo de contagio de los gatos, en este caso la vacuna contra el virus de la leucemia felina e inmunodeficiencia (esta última no disponible en Chile). La vacuna triple felina debe ser administrada entre los 2 a 3 meses de edad y luego se repite cada 21 a 30 días después, reforzándola por 2 veces más. Esto quiere decir que se administran 3 dosis el primer año de vida y luego se repite al año más tarde desde la última dosis para luego ser administrada cada 1 a 3 años dependiendo de las condiciones epidemiológicas en que viva el gato. Para el caso de la vacuna antirrábica, depende de la legislación de cada país.
Para Chile, según la última indicación publicada en Enero del 2014, los gatitos deben vacunarse a los 2 a 3 meses de edad, luego se repite al año de edad y desde ahí se administra cada 1 a 3 años dependiendo de las indicaciones del laboratorio generador de la vacuna. Esta vacunación es obligatoria por ley Con respecto a la vacuna leucemia felina, se indica su administración en gatos que sean negativos al virus leucemia felina y que tengan riesgo de contagiarse del virus leucemia o que estén expuesto a él. La primera dosis se debe administrar a los 2 meses de edad, luego 21 a 30 días después para ser repetida un año más tarde y desde ese entonces cada 2 años. En el caso de la vacuna contra virus inmunodeficiencia, no se administra en nuestro país porque no disponemos de ella. Se considerando que es una vacuna no esencial. Es importante que gatos de todas las edades sean vacunadas porque es una de las principales formas de prevención de enfermedades asociadas a los principales agentes infecciosos que afectan a los gato.