Los gatos son especies que se caracterizan por sufrir fácilmente de episodios de estrés. Para ellos, se considera estrés a toda alteración en su rutina diaria. Esto quiere decir, que cualquier cambio que se efectúe en su alimentación, ambiente, cambio de caja de arena o tipo de arena, ingreso de animales nuevos de su misma especie o de otras especies como también ingreso de otras personas, bebés e incluso cambio de posición de los muebles o adición de perfumes en la casa, podrán generar una situación de estrés.
Cuando los gatos se estresan, lo expresan comiendo menos o no comiendo nada, cambian de conducta, algunos se esconden, se colocan agresivos por miedo, orinan y/o defecan en lugares inapropiados. También se describen patologías específicas asociada a estrés como la lipidosis hepática y la cistitis intersticial.
La lipidosis hepática es una enfermedad en donde el hígado se infiltra de grasa debido a que los animales dejan de comer y movilizan reservas grasas, de tal forma que el hígado comienza a tener alteraciones en las distintas funciones que están a su cargo. Los gatos presentan signos severos como anorexia, deshidratación, baja de peso, vómitos y mucosas de color amarillo. En algunas situaciones puede ser una enfermedad difícil de manejar y puede generarse la muerte.
En el caso de la cistitis intersticial, se genera una inflamación de la pared de la vejiga y lo que observamos es dolor al orinar; el gato orina con gotitas y muchas veces lo hace en cualquier lugar, la orina puede estar mezclada con sangre, no comen por dolor e incluso se describen cuadros de obstrucciones urinarias generando la imposibilidad de orinar. Esta es la principal urgencia que se presenta.
Para evitar estrés en los gatos, es recomendable mantenerlos en un ambiente confortable, evitar hacer alteraciones en la rutina de su vida y en el caso de que sea necesario algún cambio, se sugiere hacerlo paulatinamente y utilizar diferentes alternativas para manejarlo. Se sugiere utilizar feromonas para el ambiente, incorporar flores de Bach para enfrentar miedos y nuevas situaciones, también existe tranquilizantes de uso natural (consulte a su veterinario por la mejor alternativa para su gato). En resumen, es importante hacer cambios graduales en los gatos y evitar situaciones de estrés para mantenerlos saludable.