Al igual que ocurre en diferentes especies, incluidos los humanos, el cuerpo de los gatos comienza a tener problemas típicos de la edad. Existen diferentes patologías que pueden afectarlos, por lo que siempre es importante hacer chequeos continuos con el veterinario. En este artículo te contaremos acerca de la enfermedad articular en los gatos y cómo puedes ayudarlos a que su calidad de vida sea la óptima.
La artrosis felina es definida como enfermedad degenerativa articular, es una patología en donde el cartílago que se encuentra formando parte de la articulación se desgasta, lo que comienza a producir un dolor crónico que puede afectar la calidad de vida de nuestros felinos. El dolor suele producirse en las rodillas, codos, espalda baja (zona lumbar), cadera y hombros.
Algunos de los síntomas pueden pasar desapercibidos, de hecho, puede que los gatos jóvenes desarrollen la enfermedad, pero comiencen con signos clínicos a medida que envejecen. A diferencia de los perros, las cojeras raramente, no suelen darse en los gatos debido a una enfermedad degenerativa articular, ya que esta enfermedad en los felinos suele dar de forma bilateral, es decir, en ambas rodillas o en ambos codos.
Cualquier cambio en el comportamiento normal del gato puede ser un signo de dolor, por ejemplo que ya no salte de la misma forma hacia los muebles o la cama.
Algunos de los signos que podemos visualizar en nuestros gatos son:
- Disminución al saltar hacia arriba o abajo estando sobre un mueble
- Dificultad o duda al subir o bajar las escaleras, o hacerlo con más lentitud
- Rigidez de los miembros
- Menos activo y juguetón
- Disminución del aseo o aumento del aseo en el área con dolor
- Agresividad cuando se le toma
- Dificultad para ingresar a la caja de arena y puede utilizar otros lugares para orinar y/o defecar
Si observas algunos de estos cambios en tu felino puede ser necesario indagar más sobre su actual estado de salud, para esto es importante acudir al médico veterinario y realizar diferentes exámenes y así determinar que lo aqueja, en ocasiones es necesario medicar de por vida para evitar el dolor.